Hace dos sábados me disponía a salir de mi casa cuando llego al primer semáforo y ¡toma!, mi primer tapón del año debido a una caravana política. Bien chévere que estuvo lo pendejá esa porque me la chupe desde el principio. Eso fue como una parada de Disney, pero embarra de manteca de kiosko de Luquillo. José Aponte con su nuevo look sin bigote, Roger "Chanchullo" Iglesias y un candidato a alcalde que me imagino estaba aprovechando el sol para broncearse porque este pueblo es mas popular que las nalgas de Arango y seguro va a perder.
Hay que ser bien imbécil para treparse en la parte de atrás de una troca y dar toda una vuelta por el pueblo con lo mucho que pica el maldito sol en esta isla.
Comienza mi aventura en la luz. Saco el ipod, y al infinito y mas allá. Claro, después de cagarme en ellos, la madre que los parió y toda su maldita descendencia.
Par de horas mas tarde de vuelta a mi casa la turba ya estaba reunida en el comité. Me encontré entre el idiota que tenia su turno al micrófono a mi izquierda y el imbécil estadista demostrando su regocijo tocando bocina a mi derecha, que felicidad. Para la sorpresa de mi virginales ojos que veo, dos vela güira dándose la fría en medio de la avenida. ¡Che-ve-re!
Como para la caravana sacaron a los tecatos pues en la próxima luz no vi a uno pidiéndome chavos. Eso no quiere decir que no me iban a pedir chavos en la luz, no no no. ¿Quién estaba pidiendo en la luz? Los cabrones chamaquitos con su uniforme de cualquier deporte. Cada semana es uno diferente, que si baloncesto, pelota, karate y hasta con el speedo, gorro y googles he visto a uno. Espere con paciencia y deseo a que llegara el muchachito a mi ventana. "Buenas tardes, ¿nos puede ayudar?" dijo el futuro golpeador de mujeres o escupe árbitros. Yo con este guille y encojonamiento por haberme espetao toda la caravana en la luz le digo, "Allí arriba en el comité PNP están repartiendo chavos". Y llego la hora de volver a cagarme en todo. Ese cabroncito me contesta, "Si, nosotros estamos con ellos."
Hay que ser bien imbécil para treparse en la parte de atrás de una troca y dar toda una vuelta por el pueblo con lo mucho que pica el maldito sol en esta isla.
Comienza mi aventura en la luz. Saco el ipod, y al infinito y mas allá. Claro, después de cagarme en ellos, la madre que los parió y toda su maldita descendencia.
Como para la caravana sacaron a los tecatos pues en la próxima luz no vi a uno pidiéndome chavos. Eso no quiere decir que no me iban a pedir chavos en la luz, no no no. ¿Quién estaba pidiendo en la luz? Los cabrones chamaquitos con su uniforme de cualquier deporte. Cada semana es uno diferente, que si baloncesto, pelota, karate y hasta con el speedo, gorro y googles he visto a uno. Espere con paciencia y deseo a que llegara el muchachito a mi ventana. "Buenas tardes, ¿nos puede ayudar?" dijo el futuro golpeador de mujeres o escupe árbitros. Yo con este guille y encojonamiento por haberme espetao toda la caravana en la luz le digo, "Allí arriba en el comité PNP están repartiendo chavos". Y llego la hora de volver a cagarme en todo. Ese cabroncito me contesta, "Si, nosotros estamos con ellos."  |
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